Las vacaciones de verano son sagradas. Pasamos todo el año soñando con ellas, pensando en el destino perfecto, imaginando la arena bajo los pies y el sonido de las olas… hasta que la realidad nos da un bofetón porque cometimos errores de principiante. No te engañes, reservar tus vacaciones de verano también es un arte.
Al igual que viajar en invierno también requiere de cierta preparación, dejar todo el orden para nuestras vacaciones exige cierta preparación. Sobre todo, si queremos que las vacaciones sean precisamente un oasis de paz y no otra época de estrés y nervios. ¡Para eso nos quedamos en casa!
Apunta esto a la hora de reservar tus vacaciones de verano
Si quieres que tu escapada sea digna de postal y no un desastre digno de una película de humor, evita estos fallos:
- Esperar hasta el último minuto
¡Madre mía! No sé cómo la gente puede hacer esto a la hora de prepararlo todo. ¡No lo hagas tú cuando vayas a reservar tus vacaciones de verano! Todos conocemos a esa persona que dice: «Voy a esperar una buena oferta de última hora». Spoiler: acaba pagando el triple o durmiendo en un hostal sospechoso con vistas a un callejón. Los precios suben cuanto más te acercas al verano, así que reserva con antelación y evita el drama. - No revisar la ubicación del alojamiento
Ese hotel que parece un chollo en la web… quizás esté a 50 km de la playa. O en medio de un polígono industrial. O al lado de una discoteca abierta hasta las seis de la mañana. Antes de reservar, usa el mapa y revisa bien la ubicación para asegurarte de que realmente es lo que buscas. Te vas a ahorrar más de un disgusto. - Ignorar el clima del destino
Te imaginas en un paraíso tropical, pero resulta que viajas justo en la temporada de huracanes. O decides hacer una escapada al norte de Europa y no llevas abrigo porque «es verano en todas partes». Error. Consulta el clima antes de reservar y no dejes que la lluvia o el frío arruinen tus planes. - No comprobar la política de cancelación
Otro de esos fallos que, a partir de hoy, no vas a cometer al reservar tus vacaciones de verano. Si estos últimos años nos han enseñado algo, es que los planes pueden cambiar en un abrir y cerrar de ojos. Muchos reservan vuelos y hoteles sin mirar si se pueden cancelar o modificar, y luego vienen los lamentos. Mejor asegurarse antes y optar por opciones flexibles. - Pasar por alto los gastos ocultos
Ese apartamento que parece una ganga tiene una «pequeña» letra pequeña: 100 euros de limpieza, 50 euros por persona en tasas, suplemento por aire acondicionado y un recargo si llegas después de las 22:00. De repente, ya no es tan barato. Léelo todo antes de reservar y evita sorpresas desagradables. - No planificar nada
Esto nos resulta hasta desagradable. Algunas personas dicen: «Me gusta improvisar». Y está bien, hasta que llegan a un destino abarrotado sin reserva en los restaurantes, sin entradas para las atracciones y con una lista de espera para cualquier actividad. Improvisar es genial, pero algunas reservas son imprescindibles.
Reservar unas vacaciones no debería ser una misión imposible. Evita estos errores, planifica con cabeza y disfruta del verano sin sobresaltos.